Queridos todos: dentro de pocas semanas fundiré mis blogs en uno. Podéis encontrarme como siempre en mi correo electrónico: huelladeperro arroba yajú punto espany. Aquí os dejo con un texto que tiene un par de años ¡AY!
¡Si es que lo siento! noto esa sombra pastelosa que está contigo cuando no estás conmigo. A distancia sé que tu amante está contigo. No, no. Yo soy el amante. Él no es más que el marido, el novio, el que quiere tenerte para sí, sola y exclusivamente. Por eso su sombra es lisa y uniforme. Todas las arrugas de tu alma las alisa como quien se plancha un traje, una corbata, un hermoso pañuelo de cuello que le adorne como una flor. Tú eres su mujer, su lisura, su hermosa flor lisa. Y te estiras como una flor de tulipán para caber en su alma de cencerro metálico, sin un doblez, sin una arruga, como cabíamos uno contra el otro en nuestra cama de fortuna... Él viene ahora todas las tardes a buscarte. No te quiere perder. Por eso cuando sale del trabajo dirige el coche hacia tu casa y te recoge. ¿Donde iréis? No lo sé, no quiero saberlo. No creas que me interesa lo más mínimo lo que hacéis. Sólo me sorprende, como hoy, ver que de repente desapareces de mi vista y quedas siendo, como pálido reflejo de una mujer que amo, apenas una traslúcida tulipa de cristal. ¿Qué se hizo de ti, de tu lucidez, de tu valentía? ¿Adonde vas cuando se pone como adorno tu alma en el ojal? duermes un sueño de flor aterciopelada, y tu alma escucha mis gritos desde lejos sin contestarlos. Te dió una droga hipnótica, opio o heroína, y entonces ya no sientes. No sientes y nada duele. No quieres sentir, tanto debe dolerte vivir...
Y cuando despiertas es peor. Vuelves al mundo, y yo soy el mundo. Vuelves enfadada de mi dualidad, de mi variedad. Y yo, que soy todo sincero, parezco de repente falso y embustero.
¡Ah! comparado con sus mentiras de color liso uniforme yo, que tanto vivo, parezco áspero como una piedra pomez. Y sin embargo ¡Qué riqueza encuentro en ti, en lo bueno y en lo malo! De ti me interesa la vida, no la lisura, la garra, no la gazmonia. El agua hirviente que mana a borbotones sin que puedas detenerla. Y el valor; el de echarse al agua fresca de color chocolate cogiéndose a una cuerda, el de dar sorpresas, el de hacer regalos, el de descubrir ciudades nuevas donde nadie te espera. El de atreverte a mirar fijo dentro de tu propia alma.
Por eso sé que no estás perdida, porque he acariciado tu alma con amor y ella me ha besado. Y nos hemos hecho hermanos. Hermana. Porque me has buscado y me deseas y eso es bueno para todos. Y más para la vida... Y sé que este sueño sin ensueños que ahora vives y él te da te lo sacudirás un día, como un perro se sacude el rocío después de haber dormido una noche al sereno. Pero el rocío es mejor, y ojalá te caigan las gotas que se sacude el perro, y la fresca agua sucia te despierte de esta droga embotadora y grites ¡VIVIR! y aulles como un perro, y retozes conmigo en la fresca yerba de septiembre.