21 jun 2009

. ¡Y qué miedo debe dar morirse si en el último segundo de la vida el alma se refugia en el pasado buscando otra salida!

Y aquí estamos, Madre, viendo pasar los años. Ya poca cosa queda de la alocada jovencilla que fuiste un día.
Aunque sé que fuiste joven, siempre te vi vieja, porque mira, me llevabas de ventaja muchos años.

Y qué miedo debe dar morirse si en el último segundo de la vida el alma se refugia en el pasado buscando otra salida.

Mejor cualquier otra cosa, Madre. Mejor cualquier otra cosa que esta angustia permanente. Mejor haberme matado en tu seno, cuando apenas sí pensaba, cuando apenas sí sentía, y no sabía lo que era el miedo.

¡ASESINA! ¡Asesina irresponsable! que dándomela vida me has dado la muerte.

8 comentarios:

huelladeperro dijo...

Nadie cometió mayor crimen conmigo que esta condena inexorable qaue me has impuesto

John Oliver dijo...

La vida es algo complicado, sin duda. Para muchos un castigo, dado que aún no siendo más que los buenos, los malos momentos sin embargo dejan más huella.

Pero si el castigo es conocido es porque la libertad de acción y conocimiento también lo fue, ¿no? (:

Gracias por tu amabilísima opinión!

Jorge dijo...

TAn asesina como lo contrario. El caso es que la forma que hemos elegido los humanos para la superviviencia de la especie son los hijos y creo que no es una buena opción. Si en vez de gastar nuestras energías en alimentar, cuidar, enseñar... a nuestros hijos las gastasemos en nosotros mismos. Esos padres desgastados que lo dieron todo, cuya evolución fue cortada de raíz. Ahora, con los hijos emancipados, recuperan las ideas que dejaron aparcadas, todas esas cosas que tuvieron que tragar y aguantar porque tenían unas bocas que alimentar, toda esa resignación que hundió su mundo y el futuro de sus hijos. Y esos hijos caen en los mismo errores y tienen que volver a prender las mismas chorradas.

Qué grande es escuchar al maduro, ver que vive una vida orientada hacia un lugar que te pone la carne de gallina del buen rollo que te da. Qué puta mierda es descubrir que tiene 75 años y que eso significa tener a la muerte llamando a tu puerta.

Antígona dijo...

Dijo Lutero: "Ya en el útero materno empezamos a morir".

Y dijo mucho después Bolaño en 2666: "Al dolor nace el hombre y ya hay riesgo de muerte en el nacer, decía el poema. Y también: Pero, ¿por qué alumbrar, por qué mantener vivo a quien, por nacer, es necesario consolar? Y también: Si la vida es desventura, ¿por qué continuamos soportándola?".

Y tantos son los que deben de haber dicho cosas parecidas. Porque no hay nadie a quien no le atormente la idea de su propia muerte. Pero, Huelladeperro, tú lo sabes bien: no otra cosa nos hace ser los humanos que somos. Y porque sabemos de nuestra muerte y la tememos nos afanamos por vivir la mejor vida que podamos vivir.

Aunque entiendo a quien deseara mejor ser hormiga, antílope o león. Nada meritorio hay en el hecho de ser humano, y sí mucho dolor y sufrimiento, como dice Bolaño.

Creo que esta vez bien valen los besos que tú mismo me has mandado:

Besos valientes! ;)

LêA Holubii dijo...

claro: qué es la vida sino un acercamiento constante a la muerte...

aunque dudo que morir sea algo malo, mire usted...lo que ocurre es que, a lo largo de todos estos siglos, a la muerte se le ha hecho muy mala publicidad.

¿infundada?

eso lo averiguaremos, cada uno a su tiempo.

Unknown dijo...

la vida es el camino hacia la muerte, en nuestra cultura(y en otras muchas) se da un valor excesivo a la vida sin siquiera mencionar lo que hay al final de camino, y esto es la muerte.Por tanto, si desde pequeñitos ya nos mentalizaran que la muerte no es mala sino que es un paso más, que es para lo que hemos nacido no sufriríamos tanto cuando se nos acercara guadaña en mano, es más , nos quitaríamos prejuicios y remilgos de encima y comenzaríamos a vivir como siempre hemos querido.Pensemos¿qué haríais si os dijeran que os queda un mes de vida?¿y si siempre has sido consciente de que ese momento llegaría cualquier día?¿hubiésemos vivido igual?yo creo que no

un saludo

huelladeperro dijo...

EStoy de acuerdo, Lucía, con lo que dices. La muerte nos la escamotean constantemente, nosotros, nuestra sociedad. Al final la muerte no es más que una barrera que ponemos alrededor de nosotros mismos para separarnos de aquello que no nos gusta.

¡Cómo se echa de menos "la buena muerte" en que el muriente recibía en su lecho de muerte a cada miembro de la familia para despedirse y darle un último consejo!

Isaak dijo...

En fin, la vida es un regalo relativo que aquéllos que la reciben no han pedido.

Y ya se sabe lo que pasa con los regalos a gusto del regalante: pueden gustarte mucho, normal, poco, o haberte jodido, literalmente.

Genial el "dándome la vida, me has dado la muerte", Huelladeperro.

Saludos.